En el baloncesto o básquetbol entendemos el dominio
del balón como requisito previo al pase. Para ello es prioritario
saber recibir o atrapar una pelota. La mano siempre se adapta al
balón, ahuecando la palma sin llegar a tocar la pelota. Los dedos
separados y dirigidos hacia arriba, pulgares en posición casi
horizontal, sujetando con fuerza.
El jugador que recibe el pase debe salir al
encuentro de la pelota. Para recibirla, extiende los brazos llevando
las manos hacia ella. Al hacer contacto, flexiona los brazos y
separa los codos, adoptando una posición desde la cual pueda
continuar los movimientos de la jugada siguiente.
Los ejercicios de dominio del balón se
coordinan con los primeros ejercicios de pases.